Los bebés pretérmino y de PBN son un problema de salud pública en los países subdesarrollados, alrededor del mundo mueren cada año 4 millones de niños en el primer mes de vida y la mitad de éstas muertes son asociadas a prematurez o PBN.
Con el advenimiento de la tecnología se ha logrado ampliar los límites de viabilidad y la sobrevida de bebés extremadamente prematuros e inmaduros. Sin embargo en varios estudios se asocian estas condiciones a algún grado de discapacidad, siendo los más comunes: déficit cognitivo, parálisis cerebral infantil, déficit auditivo, visual y/o sensorial. Tales hallazgos tienen mayor significancia en nacidos antes de las 26 semanas de gestación y sexo masculino. En seguimiento a largo plazo, la frecuencia de complicaciones es de 40%.
Estos recién nacidos ingresan, con frecuencia, a las Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales donde son separados inevitablemente de sus madres, limitando la lactancia y sometidos en reiteradas ocasiones a procedimientos que causan estimulación nociceptiva, como parte de la atención habitual y la exposición prolongada al dolor aumenta la morbilidad neonatal por la inestabilidad que se produce y daño neurológico que acelera la apoptosis.
Existen diferentes posibilidades de intervención temprana, para procurar la plasticidad cerebral y el bienestar del bebé.
TÉCNICA MAMÁ CANGURO
Técnica que se basa en el contacto piel con piel, lo cual convierte a los padres en una excelente fuente de calor humano y la mejor de las incubadoras para brindar a estos frágiles bebés CALOR, AMOR Y LECHE MATERNA, lo cual le ayudará en su pronta recuperación y acelerar su salida de Unidad de Cuidados Intensivos.
Beneficios:
- Es un método, sencillo, económico, fácil de llevar, que provee al bebé un vínculo afectivo, identificando el afecto como un neuromodulador, y la interacción del binomio madre-hijo, respondiendo a las necesidades de estimulación que el prematuro requiere, favoreciendo su estabilidad térmica, su crecimiento y neurodesarrollo.
- A nivel mundial se tienen resultados médicos y psicológicos importantes ya que disminuye el riesgo de muerte hasta en un 50%, hay menos infecciones nosocomiales, crecen mejor los niños, las madres se siente más competentes, la proporción de lactancia materna es más alta, acorta estancia hospitalaria y las familias canguro tienen un ambiente más estimulante para el niño, especialmente para su neurodesarrollo, sobre la base de la plasticidad cerebral.
- Los resultado del desempeño de niños prematuros que estuvieron en posición canguro fue mejor al llegar a las 40 semanas de gestación corregidas. El llanto y la irritabilidad raramente se presentan incluso despiertos, las madres adquieren más confianza en la lactancia, los bebés se sienten cómodos y se duermen rápidamente con periodos cíclicos de sueño, los niveles de cortisol descienden en tiempos tan cortos como 20 minutos y su perímetro cefálico aumenta. Hay mejor orientación visual y auditiva y la valoración de Bayley, al año de edad corregido, mostraba puntajes más elevados.
- También se ha estudiado que los niños que reciben técnica canguro pueden presentar una mejor organización inter hemisférica, gracias a un establecimiento del desarrollo del cuerpo calloso ( los niños prematuros tienen atrofia del cuerpo calloso, es decir la pérdida de fibras mielinizadas que conectan ambos hemisferios del cerebro); inducido de alguna forma por dicha técnica. Con ello se puede obtener un mejor desarrollo motor, cognitivo y comportamental.
¿En qué consiste la técnica mamá canguro?
Se coloca al bebé en medio del pecho desnudo, piel con piel, en posición vertical y de “ranita”, reemplazando la incubadora convencional las 24 hrs del día, se le brinda calor, amor en los brazos de mamá, escuchando su corazón se relaja y coordina una mejor respiración, además de organizar mejor sus ciclos de sueño.
La lactancia se facilita mediante la “posición sandía”, que favorece la coordinación succión-deglución-respiración y la lactancia a libre demanda.
¿Cómo puede llegar a dañar el desarrollo cerebral el estar en una estancia hospitalaria?
Existen factores potencialmente lesivos, de los que se encuentran: el exceso de luz, interrupciones constantes de su sueño, ruido intenso como el motor de la incubadora, alarmas, radio, golpes en la incubadora, abrir las ventanillas, abrir y cerrar la puerta inferior de la incubadora, ya que transmiten estos, sonidos hasta de 140 decibeles que si lo comparamos con la voz normal que es de 50- 60 entenderemos porqué pueden llegar a dañar.
Para evitar el estrés y diversos estímulos lesivos, debemos conocer y aplicar, como compromiso ineludible, medidas no farmacológicas contra el dolor como son, limitar el número de procedimientos, agrupar las manipulaciones, evitar estímulos luminosos, ruidos, hambre, frio, y favorecer el contacto piel con piel, mediante la técnica mamá canguro.
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